Fútbol, rock y pintura

  Bueno, hace mucho que no escribo nada. Para los vip's del blog mis más sinceras disculpas. Más de una cosa se ha presentado tras otra. Por ahí asuntos familiares y más que todo un invierno que por alguna maldita razón no arranca. Para los que se la pasan "qué linda tarde y uno aquí" o "qué dicha que no llueve", pues no sé e qué mundo viven pero no es normal que no este lloviendo a estas alturas de mayo y del año. Igual cuando vengan los apagones y el racionamiento de agua no le echen la culpa al ICE ni al AyA.

 Ahora sí, quiero simplemente ratificar que de mi grupo de amigos y conocidos soy el qué más sabe de fútbol por más que le duela al maicero de Fabián Coto. Dije que íbamos por la general y que Santos descendía y en efecto tuve el hocico lleno de razón. Por ahí y me gané un litro en una apuesta con mi querido amigo Walker, digo Walter... Walker es el apellido del escocés que me voy a bajar con hielito. Si quieren info sobre mis predicciones para semifinales y las finales, léanme en la nota de Tano de la república porque ahorita me dan esa columna a mi.

  En cuanto a música, he tenido la oportunidad de manipular dos discos recientemente. Uno es el Third de Portishead y el otro es el Ghosts de NIN. Del primero debo decirles que si bien no es el mejor álbum de trip hop de la historia, es un disco sólido y bien producido. Vale la pena escucharlo. Por otra parte, el de NIN es intrumental y es de alguna forma una vuelta a los tracks instrumentales y atmosféricos del Fragile y quizá a los del Downware... tal vez, no estoy muy seguro de eso último. Lo recomiendo.

  Busquen a Pieter Brugel, un pintor holandés de la edad media, pintó poquito después de Hieronimus Bosch. Tiene unas pinturas alucinantes y  puede que les guste lo que pintó.

P.D: la foto va para JP. Aún sigo fiel al nintendo, solo que ahora es Wii.