De Vuelta al Morera, de vuelta a casa...

A raíz de los múltiples comentarios, para bien y para mal, que ha provocado la mentada vuelta de la liga a su reducto y toda la reestructuración tanto en lo deportivo como en infraestructura, pues me limito a decir que debería tomarse como una fiesta que fue para los liguistas y que lo que ahí haya sucedido debería quedarse ahí. Sin más ni más... fotos tomadas en tan magno evento! Obviamente el staff de Timeismami estuvo presente para cubrir el evento.

Según se entiende comúnmente, un disc jockey, deejay, o pinchadiscos (joder!), abreviado como DJ, es el encargado de escoger, poner y mezclar la música, grabada en discos, en tomatingas, fiestas, bares, estaciones de radio, conciertos, discotecas o cualquier aquelarre en general. Aunque empezó haciéndose con acetatos, puede decírsele DJ a cualquier artista que ambienta con música y talento usando cualquier otro sistema de reproducción, o a través de otros programas electrónicos o secuenciadores análogos o digitales.

¿A que viene todo esto? Pues a que en la última fiesta me atreví a hacer las de Dj (Dejáte de Joder como diría Carlitos). A los que me conocen saben que desde siempre he querido hacer radio y la música es algo que me apasiona de manera particular por encima de muchas otras formas de arte. Ya había intentado hacer cosas similares cuando montaba listas de reproducción para mis fiestas o para las de otros. El único problema con eso es que cuando alguien se cansaba o pasado de tragos quería imponer sus varas, pues había que parar y poner la canción pedida y luego todo resulta algo poco interactivo. Por eso decidí intentar entrarle a la vara inspirado por Errol y Ale. Además, luego de mi debut y de la experiencia con la gente, pensé un poco en el ride e ideé una quasi clasificación.

Dentro del ride de hacer de DJ hay 3 posibilidades o al menos me parece a mi que es así. Una es tener un estilo consolidado y llegar a demostrar sus habilidades. En este caso, el Dj se encarga de escoger, mezclar y hacer lo que quiere con la música y como me dijo Ale, profanar los oídos de los demás con lo que YO quiero que escuchen. El segundo estilo es más intuitivo; alternar lo que uno quiere y piensa está matizado con lo que te van pidiendo. Esta forma funciona para hilar lo que piden con lo que el DJ pueda intercalar para que las transiciones no sean abruptas. Toma tiempo y hay que manejar bien tanto el equipo como la musiteca. La tercera viene a ser casi como DJ de radio, sólo poner lo que la gente pide. Está es la más cansada y demandante de todas pero quizá la más interactiva y quizá satisfactoria. Sin embargo, tengo que dejar muy en claro que no hay nada como escoger uno una canción que al sonar pone a todos a bailar y les saca una sonrisa.
Al final, cada quién tiene su postura al respecto y amarán a unos DJ's más que a otros. No creo que haya una forma que sea mejor que otras pero al final como bien dice el refrán, cada culo es un florero y cada quién le pone las flores que más le gustan.